Affectio Societatis: La hermandad empresarial.
¡Qué hongo, Emprendedores! Mi formación de abogado me ha permitido observar y seguir de cerca el viaje de decenas de ustedes. Cada uno totalmente distinto del otro pero todos con un elemento en común: la relación con su socio o socios. Todo empieza con ese ánimo de juntarse para poner una empresa, ese Affectio Societatis, como lo conocemos los abogados.
Este término tiene su origen en otros dos, erctum non cito y ad exemplum fratrum suorum:
Erctum non cito se refiere a la costumbre romana de que, a la muerte del padre de familia, sus bienes permanecieran indivisos entre sus herederos para crear un tipo de sociedad.
Ad exemplum fratrum suorum, se derivó de erctum non cito para permitir que otras personas pudieran crear una sociedad artificial, como si fueran hermanos.
Todos estos términos tienen su origen en un vínculo familiar, de confianza, solidaridad y empatía.
En la actualidad y desde la perspectiva legal, consideramos la intención de constituir y permanecer en una sociedad como un elemento necesario para que este acto se considere válido. No obstante, por el transcurso del tiempo y la transformación de prácticas comerciales, el significado original de la Affectio Societatis ha perdido fuerza. Ahora, dos o más personas pueden ir con su notario o corredor de preferencia para constituir una sociedad, sin mayor problema (claro que hay requisitos que cumplir pero no son complicados).
No me malinterpreten, no estoy pidiendo que se modifique la ley para requerir una evaluación de la “conexión” que tienen ustedes y sus “Bros” para constituir una sociedad, ya que eso es absurdo. Más bien, les propongo que ustedes retomen los valores que hay detrás de este concepto y los utilicen al momento de seleccionar a sus socios. Valores como estos:
Respeto: Ustedes deben valorar y reconocer las aportaciones que hace cada uno, como pieza clave de la empresa.
Cariño: Entre ustedes debe haber un afecto genuino, que se manifiesta en el cuidado y la preocupación por el bienestar del otro y, a su vez, de su empresa.
Apoyo: Deben estar presentes en los momentos difíciles y celebrar juntos los logros y alegrías.
Solidaridad: Ustedes deben ayudarse mutuamente y compartir recursos y esfuerzos para alcanzar objetivos comunes.
Empatía: Deben comprender y compartir la situación personal de cada uno.
Estas cualidades hacen que la sociedad sea un vínculo más profundo y significativo.
¿En qué les beneficia esto?
Mejora la toma de decisiones, ya que ustedes estarán alineados y compartirán una visión común.
Facilita la gestión de conflictos entre ustedes, ya que existe una base de confianza y colaboración.
Aumentará su motivación y compromiso, lo que se traduce en una cultura organizacional positiva y un mayor éxito a largo plazo.
La Affectio Societatis es más que un simple término legal; es la esencia de una relación empresarial duradera y con mayor posibilidad de éxito. Al incorporar valores como el respeto, el cariño, el apoyo, la solidaridad y la empatía en la selección y colaboración con sus socios, ustedes pueden construir una base sólida para sus empresas. En última instancia, una Affectio Societatis verdadera se traduce en una cultura organizacional positiva y un mayor éxito a largo plazo. Así que, escojan bien a sus hermanos empresariales.