Entrada #2: Libro Escamoso de Registro de Accionistas
Descripción:
Corrompido por energías arcanas, este monstruo adopta la forma de un tomo antiguo de cuero, pero su cubierta está recubierta de escamas reptilianas de un marrón oscuro, reminiscentes de un dragón petrificado. En el centro de la portada, un rostro grotesco emerge con ojos ardientes de un amarillo sulfúrico que brillan con malevolencia y vigilan el registro de accionistas en sus páginas antiguas.
Fuente de poder legal:
Código de Comercio (CC).
Ley General de Sociedades Mercantiles (LGSM).
Código Fiscal de la Federación (CFF).
Lore:
En 1934 se publicó la Ley General de Sociedades Mercantiles en México, con el propósito de regular las nacientes empresas en una economía que buscaba modernizarse. En la Ciudad de México, en un pequeño despacho iluminado por lámparas de aceite, un escribano llamado Don Isidro Salazar fue encargado de redactar los primeros libros de registro de accionistas para las sociedades anónimas que florecían en el país. Su pluma, gastada por años de servicio, trazaba nombres y cifras con precisión quirúrgica, pero esa noche, un aire gélido invadió la habitación.
El libro de registro sobre su mesa comenzó a vibrar, y las páginas se oscurecieron como si la tinta misma se rebelara. De la cubierta de cuero emergió un rostro reptiliano, con escamas que crujían como pergamino viejo y ojos que brillaban con un amarillo sulfúrico. "Soy el Tomo Escamoso de Registro", rugió la criatura. "He sido invocado por la codicia y las traiciones que manchan estos nombres. Desde hoy, protegeré los secretos de los accionistas, pero castigaré a quienes profanen las leyes que me dieron vida".
La transformación del libro no fue un accidente. Don Isidro, en su afán por terminar su labor, había aceptado un encargo turbio: registrar acciones falsas para un grupo de socios que buscaban despojar a un inversionista extranjero de su parte en una mina de plata en Zacatecas. Al inscribir nombres fraudulentos, la avaricia y el engaño impregnaron las páginas del registro y atrajeron una maldición antigua. Se dice que el terreno donde se encontraba la mina estaba consagrado a una deidad prehispánica, un espíritu de justicia que castigaba la traición. La energía del lugar, combinada con la corrupción del acto, dio vida al Tomo Escamoso, un guardián monstruoso nacido para defender la integridad de los registros mercantiles… a su manera retorcida.
Características:
Deberá contener: nombres, nacionalidades, domicilios y acciones que le pertenezcan a los accionistas, incluyendo número, series, clases y demás particularidades (Art. 128 LGSM).
Las exhibiciones que se realicen (Art. 128 LGSM).
Las transmisiones que se realicen (Art. 128 LGSM).
La sociedad considerará como dueño de las acciones a quien aparezca inscrito en el libro (Art. 129 LGSM).
Ataques:
Mirada de Auditoría: Sus ojos sulfúricos proyectan un rayo que paraliza, forzando a la víctima a revivir sus errores registrales, causando dolor psíquico.
Rugido de Citatorio: Invoca sombras de socios traicionados que atacan con la fuerza de las autoridades gubernamentales en caso de incumplimiento.
Debilidades:
Cumplimiento Estricto de la Ley: Un registro impecable lo confunde, reduciendo su agresividad.
Fuego Purificador del Registro Electrónico: La publicación del registro en el sistema electrónico de la Secretaría de Economía quema sus escamas.
Tips para combatirlo:
Utiliza un sistema de conservación de datos y digitalización conforme a la NOM-151-SCFI-2016 para garantizar la integridad de tus registros electrónicos.
Asegúrate de que los asientos se firmen por el presidente del consejo de administración o el administrador único.